Vecinos del centro se protegen ante los intentos de robo en varias viviendas

Vecinos del centro se protegen ante los intentos de robo en varias viviendas

Cáceres.www.hoy.es
A Manuel, en verano, se le multiplica el trabajo. Además de ocuparse del cuidado de la finca en la que trabaja como portero, echa un ojo en las escaleras, arriba y abajo, «patrulla» varias veces al día, intenta que nadie se cuele ni merodee por las escaleras del número 22 de la Avenida de España, varios portales agrupados en torno a la conocida como Plaza de los Maestros y que en total reúnen 122 viviendas. Está ojo avizor, aunque no es vigilante de seguridad ni está dentro de sus atribuciones. Los recientes intentos de robo han intensificado el control y ha generado cierta tensión entre los vecinos. Una de estas tentativas fallidas se produjo cuando se intentó reventar la puerta de un domicilio. Aunque los ladrones no lograron su objetivo este pequeño suceso ha activado las alarmas y Manuel, el portero, dice que los vecinos están mucho más pendientes.
En los portales de esta finca un folio impreso advierte de que se cierren bien las puertas y que no se permita el acceso a desconocidos. El portero certifica que se están tomando más medidas. A él, por ejemplo, llegan a confiarle llaves de viviendas para que compruebe que todo está bien.
Una vecina que sale del portal en el que se produjo este incidente, y que no quiere dar su nombre, se queja de que a estos bloques puede acceder cualquiera, y que no es raro ver a gente desconocida por los portales. El hecho de que esta finca se encuentre en pleno corazón de la ciudad no disuade a los que buscan dar un «golpe». ¿Hay miedo? ¿Está habiendo más robos que nunca? Fuentes de la Policía Nacional no dan cifras concretas, aunque hablan de distintos robos ocurridos en los últimos días en el centro y en barrios como La Mejostilla. El comisario de este cuerpo de Seguridad en Cáceres, Luis Ochagavía confirma estos casos (tanto los del centro como los de Mejostilla) y asegura que en se está investigando sobre ellos. Se tiende a pensar que la situación económica, la crisis, incrementa la delincuencia pero en este caso no parece tener sentido echarle la culpa al déficit. Los robos veraniegos en las casas parece ser algo tan estacional como el tinto de verano o el chiringuito de playa. Y sabiéndolo, mejor protegerse y aplicar la lógica.
Pequeños hurtos
El atraco en la tienda Bodybell de Avenida de España, a plena luz del día del pasado 24 de julio, también ha alertado a los comerciantes, aunque la preocupación es constante en las tiendas pequeñas. La bisutería 'Aita' abrió a principios del verano también en la finca de Avenida de España 22, en esa misma placetuela. Sus dueñas aseguran que para un pequeño comercio es impensable contratar seguridad privada y la rutina es estar muy pendientes de la clientela.
Los pequeños hurtos se producen a veces delante de sus narices sin que se pueda hacer nada. Hace poco les sustrajeron un pañuelo sin posibilidad de reacción. En la perfumería Castel de la Avenida de España aseguran que a ellos no les parece la situación preocupante, aunque, igual que en el bar Alconétar, creen que en el verano se relajan las costumbres y eso puede afectar a la seguridad y ser aprovechado por los que buscan sacar tajada del asueto estival. Comentan lo de Bodybell, porque no deja de ser llamativo teniendo en cuenta la ubicación céntrica de esta tienda. Este local, Alconétar, es, como el resto de los mesones de la zona, un poco termómetro de lo que sucede en el barrio, lugar de encuentro y de charla. Según cuenta uno de sus camareros todos los veranos aumenta la inquietud y la preocupación por los robos. Espera que este año se quede en eso: en una alarma que sirva para prevenir.


En el número 22 de la Avenida de España y otros inmuebles del centro ha habido intentos de robo en domicilios. :: ARMANDO MÉNDEZ.


En los pisos de la plaza de los Maestros se aconseja no facilitar el acceso a los desconocidos
LUIS OCHAGAVÍA COMISARIO DE LA POLICÍA NACIONAL
«Ha habido intentos de robo en viviendas este verano, en el centro y en la Mejostilla»