"Descontrol" en el Centro de Digitalización de Walqa

"Descontrol" en el Centro de Digitalización de Walqa
Denuncia de un grupo de trabajadores



HUESCA.- Jornadas de ocho horas con la mirada fija en el ordenador almacenando datos, tres pequeños descansos y un ambiente de presión laboral. Esta es la denuncia que realiza un grupo de empleados del centro de digitalización de datos de la Seguridad Social en walqa. Desde hace tiempo manifiestan sus quejas, en algún caso, acompañada de despido, como le sucedió J.C.M., quien junto con otros compañeros se dirigieron a DIARIO DEL ALTOARAGÓN para explicar las condiciones en las que trabajan, una denuncia a la que prefirieron no poner nombres por miedo a perder su puesto de trabajo. Este grupo resalta, sobre todo, la "falta de profesionalidad" de alguno de los responsables y "descontrol, que se traduce en tensión entre los trabajadores, unido al cansancio, algo que "al final pagamos todos". "Estamos viendo que es una situación tan seria -advierten- que es un perjuicio psicológico".

Estos empleados, con carreras universitarias, se consideran unos "números" a los que se les marca unos objetivos, pero consideran que tendrían que hacerlos "bajo unas condiciones mínimas" y que se sepa exactamente cuáles. Y es que, en la mayoría de los casos, "lo aguantamos porque no tenemos más remedio" ya que, en estos momentos, es complicado conseguir un puesto de trabajo, y tienen que hacer frente a hipotecas y otros gastos. El sueldo ronda los 800 euros, menos que hace unos meses -40 euros al día-, cuando se les cambió el contrato a fijo mensual.

En el tiempo que llevan en la empresa han observado "constantes cambios en las directrices", "abuso de autoridad" de alguna de las supervisoras y trato distinto de unos compañeros y otros, "amenazas" de despido. Para uno de ellos, la relación con sus responsable fue distinta: "Me hablaron mucho de que los trataban muy mal, pero de mi supervisora , en concreto, no puedo decir eso. Me trató de forma cordial y me trató de enseñar". No obstante, comprobó el "miedo" de sus compañeros y "todo el mundo te advertía".

Después de los despidos, esta misma semana, la dirección ha obligado a los trabajadores a cogerse sus vacaciones, poco tiempo después de que una de ellos tuviera que recuperar las horas cuando se puso mala un día, a pesar de presentar el justificante médico. Sólo esperan que en el anunciado centro del INEM en Walqa no se genere la misma situación.

SINDICATOS

Desde los sindicatos UGT y CCOO, que han seguido de cerca el tema y han recibido las quejas de diversos trabajadores, consideran que las empresas "han estado abusando del periodo de prueba", llegando a prolongarse tres meses, aunque realmente lo que consideran abusivo es la "presión laboral". Tras los contactos continuos que han mantenido con la empresa, comenta Rosa Serrano, secretaria regional de la Federación de Servicios de UGT, ha habido "bastantes cambios del sistema de trabajo", como la introducción de dos descansos más dentro de las jornadas de 8 horas -dos de 10 y otro de 15 minutos-, aunque cree que podrían mejorar la comunicación y las condiciones de algunos de ellos. La "enorme" presión que sufren los trabajadores ha perjudicado a la producción, comenta. Unas consecuencias que se vuelven en su contra porque también se les exige llegar a una cantidad de trabajo "que no se les paga".

La dificultad de defender a estos empleados estriba en que sólo unas de las empresas tienen representación sindical. De todas formas, eso tampoco impidió que los últimos 28 trabajadores que fueron despedidos por parte de Fucoda e Indra eran "contratos de producción", ante lo que "no podíamos hacer nada".

POLÉMICA GESTIÓN
Las vacaciones forzosas en el Centro de Digitalización de la Seguridad Social acabarán en el Juzgado
El comité de empresa ya ha puesto el caso en manos de la Inspección Laboral
El comité de la empresa Fucoda, una de las tres que gestionan el Centro de Digitalización de Documentos que la Seguridad Social tiene en el Parque Tecnológico Walqa, ha denunciado ante la Inspección de Trabajo las vacaciones forzosas impuestas a 42 trabajadores, ante un parón productivo debido a errores en la informatización de los expedientes.
Paralelamente, el comité ha propuesto a los afectados que denuncien en el Juzgado de lo Social la vulneración de sus derechos, ya que les anunciaron las vacaciones de un día para otro. Serían demandas individualizadas asociadas en un procedimiento plural. El asunto puede acabar con una sanción de Trabajo, y si el juez les da la razón, volverán a disfrutar las dos semanas de vacaciones.
Ambas cuestiones fueron debatidas ayer en asamblea por los trabajadores. El centro da empleo a 220 personas de Fucoda, Indra y Synergi. Esta también ha dado vacaciones a parte de su plantilla, aunque al ser una ETT quizá ni puedan recurrir.
Únicamente hay datos precisos de los afectados de Fucoda, la única con representación sindical. En principio la empresa dijo que las vacaciones serían por dos semanas, pero "nadie garantiza que esto no vuelva a pasar", señaló Miguel Leciñena, miembro del comité. "No tengo seguridad de que cuando vuelva el día 17 vaya a tener trabajo", comentó una empleada en la asamblea. Otro compañero admitió: "tenemos miedo a denunciar y a perder nuestro empleo, y más en estos tiempos".
Para Gerardo Montori, de Comisiones Obreras, "esto es peor que un ERE, es un ERE encubierto en el que ni siquiera hay posibilidad de negociar". El problema de las vacaciones se suma a las quejas por los descansos, los bajos salarios y la excesiva rotación en la plantilla.